Las autoridades del Área Metropolitana de San Salvador sabían del riesgo en el que habitaban las familias de los caseríos Los Angelitos I y II, en Nejapa. Siete meses antes del deslave que dejó nueve muertos, los mapas geológicos y directrices ambientales ya daban signos de alarma. La alcaldía de Nejapa declaró inhabitable la zona cinco meses después de la tragedia.
Reportaje Nacional
Acá termina este ciclo. Se dejó para el cierre este recuento de algunos de los trabajos que recibieron reconocimientos. Las páginas de esta revista se convirtieron, en estos 12 años y medio de publicación, en fuente de información, de entreteminiento, de análisis y de muchas otras cosas que los lectores explican mejor en esta selección de comentarios. A todos se les agradece.
El reportaje y la crónica han sido los géneros que más se buscó fortalecer en estas páginas. Ahora, en el penúltima edición tras 12 años y medio, es momento de comenzar a recordar algunos de los frutos del reporteo y de la búsqueda de la palabra exacta. A la mayoría de los evocados en esta ocasión le acompaña un extracto del editorial que sirvió de presentación.
La fotografía ha formado parte importante en estos 12 años y medio de historia de Séptimo Sentido. Por ello, este cierre de ciclo no puede dejar de incluir una muestra del trabajo realizado por estos profesionales de la imagen. Cada una de ellas cuenta en sí misma una vida, un detalle, una acción.
A partir de hoy, inicia un ciclo de cierre. La revista Séptimo Sentido tendrá su última edición el próximo 27 de diciembre. Estos domingos que quedan hasta entonces, serán para las memorias, para el repaso por esos momentos importantes que se han vivido desde estas páginas. Esta es una selección de algunas de las entrevistas publicadas a lo largo de estos 12 años y medio.
Laura Arévalo es directora de Continúa, una fundación que busca facilitar el acceso a la salud mental a las personas que no cuentan con recursos para pagar un tratamiento. Con la pandemia, el centro de atención psicológica se cerró, pero Laura no ha parado de buscar formas para llegar a la gente en las comunidades. Porque, para ella, este contexto ha vuelto más urgente el acceso a este tipo de servicios.
Kara García, directora de Proyecto Red, apoya a niños, niñas y adolescentes que viven en extrema pobreza y que han sido víctimas de abuso. Trabaja con familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad. Y, para ella, la llegada de la Covid-19 endureció las dificultades a las que ya enfrentaban estas personas. Por eso, tomó la decisión de trasladar a las comunidades todas las actividades de la ONG.
Carmen García es maestra desde hace 37 años. Desde que comenzó su carrera, ha trabajado con niños que viven en extrema pobreza. Ha enseñado en tiempos de guerra, terremotos y tormentas tropicales. Pero, para ella, la enseñanza nunca se había complicado tanto como en los tiempos de la Covid-19.
Para Ana Castillo, coordinadora de Soleterre, la virtualidad no fue una opción para trabajar con las comunidades durante la pandemia. Eso, para ella, implicaba dejar excluidas a las personas más necesitadas, a las que nunca se llega. Por eso, desde que comenzó la cuarentena, trasladó al territorio todos los esfuerzos que antes realizaban en los centros escolares.
En la casa hogar del programa Ángeles Descalzos, los hijos de los vendedores del mercado Colón, en Santa Ana, encontraban una oportunidad para ser eso, niños. Desde marzo, está cerrado. Lucy Luna, directora ejecutiva de ASAPROSAR, la institución a cargo del programa, habla acerca de todas las estrategias que ejecutan para evitar que el trabajo infantil le siga ganando terreno a la educación.