Migración, educación y habilidades blandas
La clave estaría en una educación ciudadana que pueda incidir en decisiones públicas, una ciudadanía participante no solamente para ir a colocar su voto en unas urnas.
La clave estaría en una educación ciudadana que pueda incidir en decisiones públicas, una ciudadanía participante no solamente para ir a colocar su voto en unas urnas.
Dado que esta es mi última columna en Séptimo Sentido, aprovecharía para enfatizar como lección final para el sistema político y para nuestra nación, las líneas principales sobre las que han ido mis 14 columnas publicadas.
¿Año nuevo, ciencia nueva? No, más bien, una manera que busca ser innovadora, más disruptiva, más democrática, más inclusiva.
Con historias como las de ellos, los adultos nos asomamos al país que hemos construido: uno que secuestra infancias.
Es escritora y periodista salvadoreña. Además, cuenta con una Maestría en Comunicación y Cultura por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Es autora, entre otros textos, de “La primavera se amotina”, “Sucias palabras de amor”, “Del mar es el ahogo” y “El tiempo es un texto indescifrable”.
Tenía ganas de escribir algo sobre su más reciente experiencia con las sombras del alma, aunque no hallaba por dónde empezar.
Este es un repaso por lo más importante de la atmósfera cultural durante el año que acaba. Las recomendaciones llegan de todo el mundo en las voces de escritores, músicos, periodistas y actores, entre otros.
Hace un año el presidente guatemalteco, Jimmy Morales, declaró «non grato» a Iván Velásquez, el titular de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG). Ahora, a pesar de que el comisionado aún permanece en el cargo, tiene prohibida la entrada a ese país. En la primera semana de diciembre, Velásquez brindó esta entrevista en exclusiva. Habla sobre cómo ciertos sectores se comprometen con la lucha contra la corrupción hasta que son investigados. Entonces, el panorama cambia y la CICIG ha ido sumando detractores.
Entrás en modo cobrador, primero escribís correos, luego llamás. Hacés notar que el trabajo fue entregado antes de tiempo y ya han pasado siete semanas y no te dicen nada del pago.
Esta vez me he puesto ambiciosa, y sí creo que necesitaré que me eches la mano para completar mi lista.