Carta Editorial
“Con estos relatos mostramos esa parte humana, con la que esperamos haya un reflexión y sobretodo acción para este grave problema”.
“Con estos relatos mostramos esa parte humana, con la que esperamos haya un reflexión y sobretodo acción para este grave problema”.
La más reciente intervención de Melgar está en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA).
El Salvador no es país para letras, lo hemos escuchado y lo hemos sufrido. Pero hay mucho de esperanzador en cómo este país, ingrato con sus escritores, está siendo narrado ahora.
Aumentar condenas estaría bien si, al mismo tiempo, mejorara la capacidad de investigación, el interés, el respeto hacia las familias y las víctimas.
Ante una experiencia como la de Juana, un Estado está obligado a ofrecer justicia, una expedita; debería ofrecer, también, acompañamiento integral.
Decepciona el uso en presente de golpe de estado, represión, ataques contra la prensa y desplazamientos forzados.
El desarrollo no va a llegar solo cuando todos tengamos medicinas. Para alcanzar ese estado, hace falta que todos tengamos las mismas oportunidades. Hace falta que todos tengamos una voz.
Nadie puede ya seguir sintiéndose con el derecho de no hacer lo propio por conservar y proteger el medio ambiente.
Después de que las autoridades hicieran de lado su responsabilidad de investigar, ella es la única que sigue pendiente de saber en dónde está su Rodrigo.
El hambre no se combate solo al entregar dos libras de frijol y dos de arroz. Hace falta una transformación desde lo educativo y desde las políticas de salud.