La herida de la que estamos hechos
Gritamos que deseamos paz, seguridad y trabajo. Pero nos olvidamos que esas tres aspiraciones son imposibles si para obtenerlas tenemos que aprovecharnos de los demás.
Gritamos que deseamos paz, seguridad y trabajo. Pero nos olvidamos que esas tres aspiraciones son imposibles si para obtenerlas tenemos que aprovecharnos de los demás.
La energía se renueva cuando reconocemos los ciclos naturales del espacio que habitamos, y aprendemos a descansar para reponernos.