VIAJEROS SIN CREPÚSCULO
Porque lo que más agobia a los humanos, pase lo que pase, es el paso del tiempo.
Porque lo que más agobia a los humanos, pase lo que pase, es el paso del tiempo.
En el rompecabezas de la esperanza afortunadamente siempre queda una pieza suelta.
Inundan nuestro jornada, y al final del día todo lo que anhelamos al comienzo se nos convierte en espesura almacenada.
Y en tanta más la ignoramos mayor es nuestra negación a reconocernos como testigos de cargo.
En el rompecabezas de la esperanza afortunadamente siempre queda una pieza suelta.
En el rompecabezas de la esperanza afortunadamente siempre queda una pieza suelta.
Todos los pájaros de los alrededores se juntan para la oración vespertina.
Cuando los novios entraban empezó a oírse un grandioso concierto de violines. Todos se miraron extrañados. Los novios sonreían. Era su música interior saliendo al aire.