Un instante como tal: cuando me dijeron que mi ahijada se iba a llamar como yo, sí es cursi pero bueno, cómo les digo otra cosa si es la verdad. Un momento como etapa es, sin lugar a dudas, el que vivo justo ahora: rebaso mis treintas, soy una mujer con diferentes facetas, todas súper diferentes entre sí y me encanta.
Definitivamente, a mi mamá. Es una mujer maravillosa en todos los sentidos. Si yo llegara a ser la mitad de lo que ella es, me sentiría satisfecha en esta vida.
Creer que las demás personas son como yo, que piensan como yo y que harían lo que yo haría en diferentes circunstancias.
Sí: ¡todas las pupuserías! Ya, en serio, creo que no se trata del lugar, sino que de las personas que están en ese lugar, cualquiera que sea. Y, en ese caso, sí existe.
Dispuesto a divertirse, de mente abierta, capaz de distinguir la realidad (a veces dura) sí, pero con ganas de llenarla del humor que le ponemos nosotros como ComediaES en el escenario.
Los horrores de ortografía en publicaciones importantes o de gente profesional; lo sé, es una locura, pero pues, soy loca.
La inseguridad que vivimos.